Había una vez, hace mucho tiempo, una familia feliz, formada por el padre, la madre, el abuelo, la abuela, la hija mayor, los dos hijitos, la benjamina de la familia y un perrito.
La madre era muy fuerte y valiente y siempre protegía su familia. Por eso, inventó el coraje, para que al día de hoy, nosotros, podamos defendernos de la gente mala.
El padre, era un explendido cocinero, y en su cocina siempre se distinguía un dulce olor. Por eso, inventó el olfato y todos los demás sentidos, para que al día de hoy, nosotros, podamos percibir los mejores momentos de nuestras vidas.
El abuelo, amaba el arte, y siempre creaba dibujos tan vivos como el del arco iris. Por eso, inventó los colores, para que al día de hoy, nos alegren la mañana.
La abuela, contaba cuentos a cualquiera que se le acercase. Por eso, inventó la imaginación y la creatividad, para que a día de hoy, nosotros, podamos sumergirnos en fantásticas istorias.
La hija mayor, que era muy bella, se casó con un apuesto principe. Por eso, inventó el amor, para que a día de hoy, nosotros encontremos anuestro príncipe azul.
Lo dos hijitos, eran muy alegres, y se pasaban el día riéndose. Por eso, inventaron la diversión, para que a día de hoy, nosotros, podamos tener una enorme sonrisa en la cara.
La hija mas pequeña, era muy generosa y amigable. Por eso, inventó la confianza, para que a día de hoy, nosotros la podamos compartir con los mejores amigos.
El perrito, lo vió todo y nos lo contó ensñándonos que podemos ver muchísimas cosas si habrimos bien los ojos.