Una mirada, una palabra, una canción, un lugar, un momento... un beso.
El tiempo pasa, y te das cuenta de que nada es cómo antes. Que esa persona que era capaz de sacarte una sonrisa, ahora es capaz de hacerte llorar... Que esa persona a la que tanto querías, ya no te hace falta... Que esa persona que sentías cerca, está cada vez más lejos... Que esa persona que no te podías sacar de la cabeza, ya no está ni en tus pensamientos... Y si lo está es para hacerte dudar, y para recordarte que ya no le haces falta, o que ya no tiene la necesidad de escuchar tu voz; aunque esa sea la única manera de sentirte.
No llores porque acabó, sonrie porque ocurrió. |